12

A pesar de mi advertencia, no se movieron. Debido a esto, me vi obligado a hacer lo más razonable en la situación.

—Fuera, los dos. Ahora —advertí con un gruñido antes de apretar la mandíbula. Moria fue la primera en levantarse, aún mirando a Vylia antes de sacudirse las mangas y bufar burlonamente...

Inicia sesión y continúa leyendo