73

ARIADNE

El cielo ya estaba retumbando al amanecer del día siguiente, sombrío con nubes que amenazaban tormenta. En algún momento, había habido una ligera llovizna inclinada, seguida de una caída en la temperatura. Normalmente, habría preferido quedarme en casa, leer un libro y beber algo caliente m...

Inicia sesión y continúa leyendo