Capítulo 18 Capítulo 18

CELESTE

EL MIEDO SE DERRAMÓ en mi torrente sanguíneo, sacudiéndome los miembros. Cerré la puerta con un chasquido resonante y me encogí diez tallas mientras el padre Azrael giraba, dándome la fuerza completa de su mirada.

—Fui a caminar afuera durante el almuerzo —pasé las palmas sudorosas...

Inicia sesión y continúa leyendo