Capítulo 22: Reza una pequeña oración por mí

Harlow

—¡Maldita humana!— gritó Stella mientras se lanzaba hacia adelante y ponía sus manos en el cuello de Brat. La chica era pequeña, pero seguía siendo una licántropa y no tuvo problema en levantar a Brat del suelo. Sin embargo, la soltó cuando Red y Gunner la apartaron.

—¡Stella, vamos!— excla...

Inicia sesión y continúa leyendo