Capítulo 32 La llamada extraña

—El… el celular —murmuró Amanda, su voz entrecortada por los gemidos, mientras intentaba concentrarse en las vibraciones insistentes que rompían el ritmo de su gozo.

Leonardo levantó la vista por un segundo, sus labios brillaban con sus fluidos, pero no se detuvo.

Siguió chupando su clítoris con a...

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