Mi reina.

—¡PELEA!

La campana suena dos veces, pero siento que es mi maldito corazón el que resuena en la habitación, fuerte, agudo, imposible de ignorar. Lo veo moverse primero. Pitfall carga contra ella como un toro, con el brazo derecho echado hacia atrás, apuntando a su cara como si fuera a arrancarle la...

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