Intenciones.

Kaiden llegó a casa con el viento del río aún pegado a su traje y esa mirada que lleva cuando el trabajo salió bien pero su pecho no lo siente. La puerta principal hizo un clic suave. Me vio en el sofá y luego a Mia junto a la ventana con una taza que no estaba bebiendo.

—Hola —dijo, suavizando tod...

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