Capítulo 22

Él tararea, su boca finalmente en mí, y pasa su lengua por una gota de humedad en la punta. Me pongo rígido, observándolo deslizar la cabeza entre sus labios. Todo lo que puedo pensar es en la profunda y ardiente emoción de esto.

—Mierda, sí... así —murmuro, observando cómo se mueven sus labios, el...

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