No es bueno en todos lados

La propiedad estaba tal como la habíamos dejado. Grande. Llena de todas las comodidades que uno podría imaginar.

Opresiva.

Era una prisión. Podría tener una piscina, un chef e incluso su propia cancha de tenis, pero seguía siendo una prisión.

Dolly y McKenzie sacaron a la aún mareada Jacey del Es...

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