El punto de quiebre

Will

Fingí reírme del famoso comediante, aunque no me importaban un carajo sus chistes y apenas le estaba prestando atención. McKenzie estaba a mi lado, sonriendo falsamente y aplaudiendo, aunque había una bruma de lágrimas en sus ojos.

Eso me iba a romper. No iba a ser la tontería con su familia ...

Inicia sesión y continúa leyendo