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Cuando desperté, sentí como si me hubiera atropellado un tren de carga. Todo mi cuerpo dolía, y el mero acto de parpadear parecía debilitarme. Me sentía agotada, pero no podía volver a dormir. Algo en mí no lo permitía, y también las luces.

Las malditas luces que eran tan intensas y estaban enfoca...

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