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—¿Qué haces aquí, Myra?— La voz de Mateo retumbó en la habitación, enviando escalofríos por mi columna. Aunque había sido firme en no ceder ante él, una parte de mí se derritió al escuchar su voz.

Aunque venía a visitarme por la noche, parecía parte de mis sueños. Sin embargo, enfrentarlo a la luz ...

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