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De vuelta en mi habitación, me deslicé bajo las sábanas y me quedé allí durante horas, escondida. Lloré en silencio por un rato, incapaz de detenerme. Los recuerdos de aquellos días oscuros volvieron en oleadas, sacudiéndome hasta lo más profundo.

Fue todo en lo que pude pensar el resto de la noche....

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