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ISBERLT.

—Tengan cuidado —dice Río mientras me da una palmada en la espalda. Estamos frente a la habitación del Rey Alfa, y yo asiento con una sonrisa antes de volver mi mirada hacia la puerta.

—Pueden pasar —se escucha su voz segundos después. Río me dedica una última sonrisa antes de aleja...

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