capítulo 34

Al llegar al bloque de apartamentos, Abbey se acercó y presionó el timbre del número 23. Sonó durante unos 3 minutos hasta que hubo una respuesta.

—Sí.

La palabra sonó arrastrada y forzada, como si la persona al otro lado se hubiera obligado a contestar.

—Hola papá, soy yo.

La puerta hizo clic y...

Inicia sesión y continúa leyendo