Extraño mi serpiente - Príncipe Serpiente

POV de Nora

El ascensor finalmente nos llevó al suelo común. Tan pronto como puse un pie en el suelo común, todos quedaron atónitos al verme viva. Will fue el más encantado de verme y me recibió con los brazos abiertos. El Mayor Gregory me miraba con sospecha, con muchas preguntas en su mente. Eve se acercó a mí y preguntó:

—¿Cómo sobreviviste a la cascada? Pensamos que te habíamos perdido. El Mayor Gregory envió a algunos rescatistas a lo largo de la cascada, sin éxito.

Ross interrumpió:

—Déjala respirar primero. Nora, ve a ver a Meghan. Lloró todo el día y la noche, negándose a comer.

—¿Qué? Voy ahora mismo.

Corrí hacia la cabaña de Meghan. Ella estaba llorando, y Mary intentaba consolarla.

Murmuré:

—¡Meghan!

Ella estaba en estado de shock al verme. Al principio, no creía que realmente me estaba viendo. Luego, en cuestión de segundos, se dio cuenta de que realmente estaba allí. Corrió hacia mí, abrazándome fuertemente y llorando profusamente.

—Pensé que te había perdido. Eras mi responsabilidad. Nunca podría perdonarme si algo te hubiera pasado.

—Está bien, Meghan, no te culpes. ¿Ves? Estoy sana y salva. Ahora deja de llorar y vamos a comer algo; estoy famélica —hice una cara tonta.

Pude ver la débil sonrisa en el hermoso rostro de Meghan. Me abrazó de nuevo y me llevó al comedor, negándose a soltar mi mano. Liam ya había preparado nuestros platos en la mesa. Todos brindaron por mí, y comenzamos a disfrutar de la deliciosa comida.

Durante la cena, Meghan me observaba curiosamente, como si intentara leer mi mente. Tal vez esperaba que estuviera en shock, llorando, preocupada, bla... bla... porque eso es típico de mí, pero en cambio, estaba bastante serena e imperturbable. De vez en cuando, me sonrojaba al recordar los momentos del día frenético pero fantástico.

Después de la comida, me despedí de todos y me dirigí a mi cabaña. En el camino, el Mayor Gregory me detuvo y pronunció:

—Hablaremos mañana.

Asentí y me dirigí a mi cabaña.

Rápidamente me di una ducha caliente y me acomodé en mi cama. Estaba demasiado cansada pero incapaz de dormir. Mi mente constantemente se desviaba hacia los pensamientos de mi serpiente. Tomé su brazalete en mi mano y comencé a preguntarme quién era él. ¿Era algún tipo de mutante como en la película de X-men? ¿Cómo podía transformarse en una serpiente? ¿Estaba soñando? ¿Estaba alucinando? Tal vez ese bosque tenía algunos arbustos que podían causar alucinaciones. Pero, ¿qué hay de la pelea con el lobo? Fue real. ¿Por qué me sentí tan atraída hacia él? ¿Es él el de mis sueños? ¿Por qué lo extraño tanto?

Mis pensamientos fueron interrumpidos por el sonido de alguien aclarando la garganta. Meghan estaba en mi puerta, observándome inquisitivamente. Escondí el brazalete bajo mis piernas y le di un asentimiento invitador. Se sentó a mi lado, esperando que dijera algo. Suspiré, sabiendo que no podía ocultarle mis pensamientos y emociones. Ella puede atraparme fácilmente si estoy mintiendo o escondiendo algo.

Comencé con la parte en la que recuperé la conciencia. Le conté a Meghan sobre él, cómo luchó con los lobos y finalmente su metamorfosis en una traicionera serpiente voladora. Meghan se estremeció al escuchar esto. Volvió a preguntar:

—¿Estás segura de que era una serpiente?

Asentí afirmativamente. Quería omitir la parte sin ropa porque Meghan me torturaría con todo tipo de preguntas. Pero mi constante sonrojo con solo pensarlo me delató.

Meghan interrumpió instantáneamente:

—Estás ocultando algo.

Me reí, con mis mejillas poniéndose rojas y carmesí de vergüenza. Le conté cómo estaba desnudo después de volver a ser hombre.

Meghan casi saltó de emoción.

—¿Qué demonios, intentaste ocultarme esta parte de la historia?

Y luego comenzó su lista interminable de preguntas.

—¿Cómo era él? ¿Realmente lo viste desnudo? ¿Es guapo? ¿Cómo fue? ¿Era diferente de los hombres en la Tierra? ¿Sabes de qué estoy hablando? Dime ahora, todo en detalle. Me voy a morir. ¿Se besaron, tuvieron sexo?

Me sentí avergonzada por sus preguntas. Instantáneamente me arrepentí de haber compartido sus detalles personales con ella. Le dije claramente que no hablaría más de él con ella. Ella entendió, pero eso no detuvo sus preguntas.

—¿Cuál es su nombre? ¿Dónde vive? ¿Es un alienígena? ¿Crees que es la misma persona que aparece en tus sueños?

Respondí tristemente:

—No sé nada de él. Ni siquiera su nombre. No hablaba mucho, ni siquiera respondía a mis preguntas. No sé quién es. ¿Dónde vive? No sé si alguna vez lo volveré a ver. No estoy segura si es la misma persona de mis sueños. El cabello era diferente. El del sueño tiene el cabello largo con una media coleta, mientras que su cabello es corto.

—Tal vez, se cortó la coleta después de salir de tus sueños —bromeó Meghan.

No pudimos evitar reírnos histéricamente.

—Sabes, Meghan, no sé si esto fue amor a primera vista. Pero cuando lo vi caminando hacia mí, de alguna manera el resto del mundo pareció desvanecerse. En el momento en que lo vi, supe que estaba mirando mi futuro. Entró en mi vida de la nada, y de repente solo podía pensar en él. Su mero toque, cuando me cargó, tuvo un efecto hechizante en mí. ¿Qué me está pasando? Enamorarme nunca estuvo en mis planes hasta que lo conocí hoy. Es el sentimiento más maravilloso.

Meghan tomó mi mano y me consoló:

—Creo que enamorarse siempre es una sorpresa. El amor no es algo que encuentras. El amor es algo que te encuentra. Si él es el de tus sueños, entonces seguramente lo volverás a ver. Recuerda siempre que el destino te mostró esos sueños, te trajo a este planeta contra todo pronóstico, te hizo caer en la cascada, lo cual era imposible de sobrevivir. Y este destino solo te ayudará a encontrarte con él de nuevo. Tengo la fuerte intuición de que él es tu alma gemela y lo volverás a ver pronto.

Las palabras de Meghan tuvieron un efecto tranquilizador en mí. Todas mis preocupaciones y tristeza desaparecieron.

Le dije a Meghan:

—El Mayor Gregory quiere hablar conmigo mañana, pero no quiero decir nada sobre él y su forma de serpiente.

Meghan asintió comprensivamente.

Finalmente, antes de irse, Meghan dijo:

—Ve a dormir temprano hoy. Mañana vamos a la ciudad capital de Westfall. El Príncipe Rorik nos ha invitado al palacio real. Ponte la mejor de tus ropas.

—Buenas noches.

Hola a todos, para más actualizaciones sigan mi página de autora en FB, Author Lunafreya, Gracias.