CAPÍTULO 57

Gimo en mi sueño al sentir un terrible dolor de cabeza. Abro los ojos mientras me masajeo la cabeza. Veo que no estoy en mi cama; en cambio, estoy atado a una silla. Intento liberarme de las cuerdas alrededor de mis manos, pero cuanto más lucho con ellas, más queman mi piel. Es como si fueran de pla...

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