Capítulo 131

—Tienes que estar bromeando.

—Oh cielos— escuché decir a Imogen, lo que me hizo mirarla.

Ella negó con la cabeza hacia mí.

Desvié mi mirada hacia Adrian mientras mi corazón se apretaba y aceleraba al mismo tiempo. Caminaba hacia los padres de Nadia con Candela aún aferrada a él como la esposa peg...

Inicia sesión y continúa leyendo