Capítulo 1186 Ella probó una gran cantidad de dulzura hoy

Lorenzo no pudo soportarlo más y gritó:

—¡Darlene, no te pases!

Los ojos de Darlene se abrieron de par en par, sin creer que él realmente se atreviera a gritarle.

—¡Lárgate! ¡Lorenzo, mira tu propio estatus, qué derecho tienes a gritarme! ¡Lárgate!

El rostro de Lorenzo se puso rojo de ira, y abr...

Inicia sesión y continúa leyendo