Capítulo 1582 No queda nada más que la voluntad de sobrevivir

Su cuerpo fue lanzado por el impacto, haciéndola rodar colina abajo.

El conductor golpeó el volante con el puño y escupió por la ventana.

—¡Maldita sea! Se fue por el borde. ¡Tenemos que asegurarnos de que esté muerta!

—Olvídalo —respondió su compañero—. Esa caída la matará o la dejará paralítica....

Inicia sesión y continúa leyendo