Capítulo 905 Si no vienes, te dejaré aquí

Los ojos de Raymond brillaban de ira. Escaneó la zona, pero Selena no estaba en ninguna parte. Con un suspiro frustrado, comenzó a bajar.

Pero ¿Max? Oh, Max no estaba dispuesto a ceder. El perro estaba decidido a encontrar a Selena y no se movía ni un centímetro.

Raymond exclamó: —Max, vamos. Si n...

Inicia sesión y continúa leyendo