Capítulo cuatrocientos noventa y dos

LIEF

Cada pequeño rastro de enojo que tenía hace unos momentos se desvanece de mí con las palabras que Polly acaba de confesar.

¿No lo ha amado en mucho tiempo?

No lo ama.

—¿Cuánto tiempo es mucho tiempo? —me escucho preguntar mientras avanzo lo más discretamente posible.

Los ojos de P...

Inicia sesión y continúa leyendo