Capítulo 30: El bosque de los horrores

Cuando la pesada puerta de bronce del castillo se cierra tras de mí, mi corazón da un vuelco. El pánico burbujea en mi interior y no puedo evitar volverme para mirar la fortaleza que acabo de dejar. Es un momento de realización, de entender que no hay vuelta atrás, aunque quisiera. La puerta de bron...

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