Capítulo 271 Estoy cansado

A las 3:30 de la tarde, el sol finalmente rompió a través de las nubes, iluminando un sedán negro estacionado en la carretera.

Isabella se recostó en su asiento, su mirada tranquila mientras observaba el paisaje pasar rápidamente por la ventana. Sus ojos estaban ligeramente bajos, perdida en sus pe...

Inicia sesión y continúa leyendo