Capítulo dieciséis

—¡Tío Graham!— gritaron todos mientras usaban a Graham como una especie de gimnasio.

La madre de Graham se rió y acarició los brazos de Catherine mientras esperaban a que el caos se calmara. —Pasa cada vez— se rió. El corazón de Catherine se calentó al ver a su compañero jugando y haciendo cosquill...

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