Capítulo 48. Discusión.

Mientras Samuel ponía el auto en marcha mantuvieron un silencio sepulcral, que Amelia rompió cuando ya estaban en la carretera.

—No debimos irnos así.

—Así cómo.

—De forma tan violenta. Quedó en evidencia que estabas molesto.

—Es que estaba molesto —rectificó el hombre dirigiéndole una mirada ir...

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