Capítulo 344

Nunca he sido atlética. Paula, en cambio, amaba hacer ejercicio y sabía cómo pelear. Antes de que pudiera detenerla, le dio una patada devastadora a Bobby entre las piernas.

Bobby se derrumbó de nuevo, agarrándose y aullando de dolor, con lágrimas y mocos corriendo por su rostro. La multitud que se...

Inicia sesión y continúa leyendo