Demasiado bueno para ser verdad

Kristen entró a la casa llevando una bolsa elegante y su bolso en la misma mano. La casa estaba desierta excepto por las sirvientas que tenían una cosa u otra que hacer. Ignoró su presencia y continuó caminando, pero se detuvo un momento después.

—Ven aquí.

La voz de Kristen llamó la atención de l...

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