Mi vida es un infierno

Sebastián es ciego, pero sabe defenderse. Él es muy audaz, se suelta del agarre del padre de María. —¡En tu puta vida te atrevas a ponerme una mano encima!— exclamó Parrow, no tolera para nada a ese señor

—¡Te voy hacer pedazos si a mí hija le pasa algo! Te voy a hundir en la cárcel por matarla, y m...

Inicia sesión y continúa leyendo