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No podía escuchar bien, mi corazón latía con fuerza en mis oídos.

—¿Nosotros, qué?— me escuché decir, aunque mi voz sonaba muy lejana.

Él rió y se acercó un poco más.

—Pensé que querrías tener buenos recuerdos de tu boda— comentó, encogiéndose de hombros, curvando sus labios en una media sonrisa ...

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