189. «No me dejes, carajo».

— ¿Quieres tragarte el resto de tus dientes? —amenaza Abraham, intentando una vez más lanzarse hacia él, deteniéndose solo por mi mano presionando contra su pecho con todas las fuerzas que me quedan.

Milan ríe de nuevo, más débil ahora, cada risa claramente dolorosa, pero a él no le importa. La san...

Inicia sesión y continúa leyendo