Capítulo 89

Soren olió instintivamente su manga.

Era su colonia favorita, una fragancia rara y única.

Sus ojos se abrieron de horror. —No, no puede ser, es imposible.

Soren recordó algo de repente y se giró bruscamente, mirando a Rhiannon entre la multitud.

—Rhiannon, ¡diles! Estuvimos juntos esa noche, ¿ve...

Inicia sesión y continúa leyendo