Capítulo 115

Miré a Ethan con incredulidad.

Sus ojos gris acero se oscurecieron. —Justo es justo, Lucy. Quiero que me dejes las mismas marcas que yo te dejé a ti.

Una ola de calor subió desde mi cuello hasta mis mejillas, mi piel prácticamente ardiendo. —¿En serio? Esto es ridículo, Ethan. Nos estamos divorcia...

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