Capítulo 268

Una oleada de calor inundó mis ojos. No sabía qué decir, simplemente subí las escaleras en silencio, necesitando un lugar para despejar mi mente. Sin darme cuenta, me encontré frente a la puerta del dormitorio de mis abuelos.

La puerta de madera crujió suavemente y mi corazón tembló con ella. La ha...

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