Capítulo 287

El momento en que entré en la lujosa casa rodante, la puerta del baño se abrió, liberando una nube de vapor y el aroma del gel de baño. Mi corazón casi se detuvo cuando Lucy emergió—envuelta solo en una toalla blanca como la nieve, gotas de agua aún deslizándose por su clavícula. Dios, era impresion...

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