17.

Hubo un momento de silencio antes de que el mocoso y sus amigos comenzaran a reírse como maniáticos.

Bueno, si podían hacer eso con Alex dándoles esa mirada aterradora, entonces no había duda de que o estaban completamente locos o demasiado borrachos para preocuparse por sus partes del cuerpo.

—Oo...

Inicia sesión y continúa leyendo