Capítulo 68

No sé qué me poseyó para decirle que sí a tener una conversación con Adrián, pero el viaje en el ascensor hasta mi apartamento me tiene ansiosa y nerviosa. Una avalancha de incertidumbre inunda mi mente y soy incapaz de mirarlo mientras él me observa.

—Estoy bien —digo, mirando sus ojos antes de de...

Inicia sesión y continúa leyendo