20

La batalla seguía su curso, nuestro movimiento era un borrón de garras y dientes. Mi corazón latía con miedo, pero la traición de Víctor se sentía como una herida. ¿Cómo pudo hacernos esto y por qué razón?

Las preguntas se arremolinaban en mi mente, brotando como una fuente.

La batalla disminuyó, la...

Inicia sesión y continúa leyendo