Capítulo 12

Rosalind

El frío de la mesa de operaciones se filtraba a través de la bata delgada hasta mi columna vertebral. Me esforzaba contra las esposas que ataban mis muñecas y tobillos, el metal se clavaba en mi piel mientras luchaba.

—¡Ayuda! ¡Alguien, ayúdeme!— Mi voz se había vuelto ronca de tanto grit...

Inicia sesión y continúa leyendo