6. Di mi nombre

Ella trató de resistirse—Dios, cómo lo intentó—sus músculos se tensaron mientras se apoyaba contra el suelo, sus uñas raspando las frías baldosas en un intento inútil de anclarse. Pero su agarre en su cabello era implacable, sus dedos se retorcieron más fuerte, tirando hasta que las raíces gritaban ...

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