15. A tientas en el auto I

El corazón de Cassius latía como un martillo neumático, el afrodisíaco recorriendo su cuerpo, convirtiendo su sangre en fuego.

No podía quedarse aquí ni un segundo más, no con sus hermanos mirando a Caroline como lobos, sus propios miembros ahora tensos.

No podía revelar la verdad sobre la jugada ...

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