22. Sí, Gran Hermano, al carajo

Caroline tragó saliva con fuerza, su piel erizándose al ver el brutal equipo en sus manos, su cuerpo temblando de emoción.

Y sin embargo, en lo más profundo, una verdad floreció que la aterrorizaba y emocionaba:

Nunca supe que llegaría a amar tanto la crueldad... pero lo hago.

Me encanta.

*A...

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