Débil

Golpeo las puertas de cristal con fuerza, abriéndolas para pasar. Ignoro las miradas de los que van al gimnasio a altas horas de la noche y entro en la sala principal. Busco con la mirada a un imbécil alto y calvo. Cuando lo veo junto al ring de boxeo, charlando y riendo con un tipo enorme con un oj...

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