81 En la misión 1

Me giré y le sonreí, fingiendo entusiasmo. Sin previo aviso, ella saltó sobre mí, envolviendo sus piernas alrededor de mi cintura y tirando de mi cabello. La empujé contra la pared y la penetré con rudeza, canalizando mi disgusto, ira y odio en el acto. Mis pensamientos se arremolinaban con imágenes...

Inicia sesión y continúa leyendo