Capítulo 102: El amanecer del rey gorila

El Velo se desvaneció con el primer beso del amanecer.

Me desperté enredada en calor y pelaje y la respiración constante de mis compañeros, las palabras de los dioses aún resonando en mi cabeza: Lo necesitarás.

Mis venas zumbaban con luz de tormenta, cada nervio vivo. A mi alrededor, Greyson fue...

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