Capítulo 164 - Un momento de calma

El día no se había acabado y nosotros íbamos viajando a Cali; Genaro, Milton, mi abuela y yo. Menos mal estábamos en Bogotá y no en Duitama, de lo contrario esto habría sido aún peor. Íbamos los cuatro y nos quedaremos en el hotel donde aún estaba abierta la cuenta de mi hija y Juan Eduardo.

Va...

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