Capítulo 165 - Ataque

Estaba tan nerviosa, y el silencio de Juan Eduardo me tenía a punto del colapso. Me quité las manos de mi rostro para verlo sonreír. Y ese gesto me dio un parte de tranquilidad.

—¿No somos primos?

—Mi tía no tendrá remordimiento por haberse casado con mi tío.

—¡No somos primos! —negó.

Salté a ab...

Inicia sesión y continúa leyendo