CAPÍTULO 139

—No pares... ¡Joder! ¡Golpéame más fuerte!

Mi boca se abrió al ver a Casey siendo tratada brutalmente por ese maldito lobo gris viejo en lo que parecía ser una habitación de hotel.

Ahora tenía sentido aquel día cuando los vi a ambos bajando las escaleras.

Su apariencia desordenada, su mirada secr...

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