Capítulo catorce

Lunes.

Melissa Miller.

El viaje a su casa fue una tortura, con ambos teniendo sus manos en mis muslos. Intenté de todo para mantener la calma y fingir que no me estaba afectando, pero lo estaba.

—Ya casi llegamos, querida. —Christopher habló con su boca cerca de mi oído.

Cerré los ojos por un mo...

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