CAPÍTULO TREINTA Y TRES

Vincenzo Santoro.

11:30 «Hospital Center», Italia.

Abrí los ojos y los cerré rápidamente debido a la luz brillante que me molestaba.

¡Mierda santa! ¿Dónde estoy?

La abro una vez más para acostumbrarme a la luminosidad, observando con atención el lugar en el que me di cuenta de que era una habita...

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